miércoles, 26 de septiembre de 2012

La confianza como actitud vital




Quisiera que, a través de las siguientes líneas, pudiéramos tratar de desvelar algunas de las causas o claves que marcan la personalidad de cada uno de nosotros en el sentido de comprender cómo hemos llegado a desarrollar una actitud vital más o menos confiada.
No es fácil entender este proceso de construcción personal pues, como señala J. Garder en su libro El mundo de Sofía, “si la mente del ser humano fuera tan sencilla que pudiéramos comprenderla, entonces seríamos tan estúpidos que tampoco la
comprenderíamos”. No obstante vamos a tratar de realizar un acercamiento comprensivo hacia este tema.
Comencemos señalando que el término confiar proviene del latín confidare y lo podemos entender como la “esperanza firme que deposita una persona ante una determinada situación, persona u objeto”. Implica una actitud o predisposición a actuar de una forma particular en relación a los demás (confiar un secreto a un amigo), a los objetos (confiar en que el coche aguantará un año más), a situaciones vitales (confiar en que la vida transcurrirá por senderos que nos depararán bienestar) o en uno mismo (confiar en que seremos capaces de superar un determinado examen).Continuar leyendo en el siguiente enlace :

http://www.itgestalt.com/cms/sites/default/files/La%20CONFIANZA%20como%20actitud%20vital.%209-05%20M.%20SANA_0.pdf